Imagen: Cortesía. |
El día de ayer (29/09/2017) me dirigía al Estadio Olímpico de la U.C.V. a hacer efectiva la compra de una entrada para duelo de mañana, Caracas F.C. vs. Deportivo Táchira. En el trayecto, tuve la oportunidad de platicar con una señora mayor, le calculo unos 70 años. Ella era chilena, aunque confiese que aunque mantiene aún el acento. No lo había notado, hasta que me lo dijo.
Nos encontrábamos en el Metro de Caracas, dirección Palo Verde. Ella se sube al vagón y nota que no hay puestos libres, pero sí una señorita de alrededor 24 años, con una niña de 8 años (le calculo yo) sentadas en uno de los puestos azules. Ella (la señora mayor chilena) me comenta: "Yo llevo 40 años en Venezuela, y nunca me adapta a la falta de educación del país. Yo soy chilena". En ese momento todos los clavos entraron en su lugar, y su acento me decía que no mentía, por lo menos referente a su nacionalidad.
Me añadió: "Si yo pudiera con una varita mágica brindarle educación y buenos valores a éste país, lo haría". Sin embargo, no tardó mucho en resaltar las cosas que para ella (en 40 años de experiencias) ha observado del país: "Venezuela es un país hermosísimo, lo amo. Pero no existe la educación ni los valores que en mi Chile natal". Cabe destacar que si yo le calculo unos 70 años, debió vivir al menos 30 en su país, Chile.
Lo que al principio se conviritó en una queja por la situación presentada, vista, se volvió una charla amena con una extranjera con 40 años en el país. "El venezolano es bueno, si yo tuviera que elegir un amigo, o estuviera en una situación de vida o muerte, llamaría a un venezolano".
Posteriormente la señora logró sentarse, y pocas estaciones después llegó a su sitio destino. La nutritiva conversación terminó con una típica frase venezolana: "Chao chamo". La falta de educación del venezolano no solo es intelectual, o cultural. También es social y de eso no sólo lo notan los extranjeros que nunca han visitado el país, también los que llevan décadas aquí.
Recuerdo que un amigo me dijo palabras más, palabras menos: "Hay muchos días feriados en Venezuela. Y en esos días, en vez de ser libres, deberían en las escuelas y liceos tratar el tema por el que es feriado ese día".