Juan Pablo Añor Acosta, el menor en una familia de fútbol, que por palabras del mismo jugador "Está totalmente contenta". Pero como no hacerlo, "Juanpi" como es conocido desde su llegada a España, salió del Colegio San Ignacio de Loyola, una institución muy famosa en Caracas y en el país por la gran cantidad de deportistas que allí han dado sus primeros pasos tanto personal como futbolísticamente.
Gracias a sus impresionantes actuaciones Juan Pablo empezaría a formar parte en el 2008 a las categorías inferiores del Caracas FC donde no duró mucho. A eso del 2009, un club de España fijo en él, tan solo un adolescente quien estaba apunto de culminar sus estudios de bachillerato se iría muy joven al Málaga CF, equipo donde milita actualmente.
Desde muy pequeño les rindió orgullo a sus parientes, siguiendo los pasos de Bernardo Añor padre, y hermano. Uno ex jugador vinotinto y el otro futbolista de la MLS que no ha podido materializar un mayor éxito. El menor de los Añor pasó por todas las categorías inferiores de la Selección, sub 15, sub 18 y sub 20. Hoy en la mayor, seguidilla que lo que lo ayudó a formarse como jugador.
Un chico educado, discreto, paciente, inició jugando en la filial del Málaga (Atlético Malagueño), su esfuerzo y trabajo lo llevaron al primer equipo, se sudaba las convocatoria y lo premiaban con minutos, pero para el técnico aún se encontraba "muy jojoto". No fue sino hasta los 20 años cuando logró su meta al ser alineado por Bernd Schuster en Mestalla ante le Valencia. A partir de allí sus intervenciones serían fugaces y sin demasiado brillo. Cometía errores típicos de juvenil y no veía continuidad. Su falta de experiencia en el primer nivel lo relegaba al filial.
En esos vaivenes el jugador se esforzó estoicamente por sacarle provecho a sus fortalezas. Caso similar en la selección, parecido al caso de Christian Santos, Juan Pablo Añor ha sido uno de los futbolistas más colisionado por los venezolanos en las calles cuando se habla de un "salvador" vinotinto.
Recientemente, aquel niño creció, tanto física, como mentalmente. Ya no cuenta con 16 años, sino 22 y debido a su gran crecimiento se ha forjado un lugar en el once titular del Málaga CF. Con la selección tocó a su puerta con una oportunidad de oro, llamado a hacer una de las grandes promesas de Venezuela y de la Copa América. Las esperanzas son grandes su educada zurda. Y en esa zancadas y desborde de banda sensacionales.
Él es un jugador muy inteligente por lo que comenta su compañero de equipo y selección, Roberto Rosales: “Jugar con Juanpi es muy fácil, es muy técnico y sabe leer el partido”.
Ahora, ¿podrá usar todas esas cualidades en la Selección? ¿Será titular en la era Dudamel? Por su nivel mostrado parece que sí, junto a Rómulo Otero formarían esa pareja de volantes que brilló ante Costa Rico y en los últimos encuentros de la era de Sanvicene.
Juanpi es uno de los jóvenes con más cartel en esta Copa América, está llamado a brillar ¿Lo hará? Quien sabe, pero lo que Añor y su familia tanto añoraban llegó: regularidad y oportunidades. Ahora, le toca hacer lo que mejor sabe, jugar al fútbol.